Las diferencias con su predecesor son escasas. Tanto que cualquiera ni siquiera las notarían, pero sí un buen spotter. Se avistaron dos unidades juntas en Barcelona, por lo que posiblemente estén llevando a cabo las últimas pruebas para salir finalmente al mercado.
Para darnos cuenta de los cambios necesitamos recordar el modelo antiguo, y así ir repasando los nuevos detalles. En la parte frontal, la calandra es ligeramente diferente, y el cambio más visible es el de los faros por unos de menor tamaño y de forma diferente, además de estar dotados de tecnología LED. Esto le da un aspecto un poco más renovado al SUV americano. En la parte trasera todo se ha mantenido con la misma forma, pero los pilotos han sido sustituidos por otros de tipo LED y que llevan oscurecida su mitad inferior. Otros pequeños cambios son la incorporación de un sistema de start/stop, mejoras en la caja de cambios de 8 velocidades y en el launch-control. La caja de cambios tiene que soportar un trato bastante exigente por culpa del potente motor de 8 cilindros y 6.4 litros, que genera 477 cv de potencia y 630 nm de par. ¡El nuevo Jeep ha sido avistado realmente rápido, ya que el comunicado de prensa fue enviado el día 14 de enero!
